Heliodoro Cerros Flores

¡GUERRERO REGISTRA LOS NIVELES MÁS ALTOS DE INSEGURIDAD Y VIOLENCIA!

En los últimos días la inseguridad y violencia se han desbordado a lo largo y ancho de esta entidad federativa con una serie de hechos delictivos que han alarmado a la sociedad, desde donde ya se empiezan a lanzar reclamos de manera abierta a las autoridades de los diferentes niveles de gobierno para que asuman su responsabilidad ante la gran problemática que se enfrenta.

Los funcionarios de seguridad pública y los mandos de las fuerzas castrenses en la entidad, junto con la gobernadora Evelyn Salgado, se reúnen todos los días, por las mañanas, en lo que han denominado “Mesa para la Construcción de la Paz” en donde se analizan los temas de la inseguridad y la violencia y los hechos delictivos que se cometen en esta entidad federativa.

Regularmente, y por la información oficial que se da a conocer de manera pública, los crímenes dolosos siempre se mantienen a la baja, sin embargo, las cifras alegres de los hechos delictivos chocan con la realidad que enfrenta toda la sociedad en el Estado de Guerrero.

Apenas el pasado 18 de abril, la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Isela Rodríguez, informó que en el primer trimestre de 2023 en el Estado de Guerrero se reportaron 406 homicidios dolosos, colocando a esta entidad federativa como el octavo respecto a los delitos de este tipo que se cometieron a nivel nacional en esa fecha.

Asimismo, la funcionaria federal dio a conocer la estadística de homicidios dolosos en los 50 municipios prioritarios del país, señalando que durante los últimos 12 meses, de abril de 2022 a marzo 2023, Acapulco se colocó en el 4º lugar a nivel nacional con el registro de 461 homicidios dolosos; Iguala de la Independencia ocupó el lugar 42 con 141 homicidios dolosos y Chilpancingo en el sitio 49 con 41 crímenes del mismo tipo.

En este sentido, y de acuerdo a la información de la SSPC, en ese periodo el Estado de Guerrero se colocó a nivel nacional en el octavo lugar con el registro de homicidios dolosos, solo debajo de los Estados de Guanajuato, Estado de México, Chihuahua, Baja California, Jalisco, Michoacán y Sonora.

Sin embargo, la información oficial choca con la realidad porque los delitos de alto impacto, desde los homicidios dolosos, los feminicidios, la desaparición de personas, las extorsiones, el desplazamiento de decenas de familias y el control de territorios de la delincuencia organizada, tienen en jaque la seguridad que se brinda a la ciudadanía en esta entidad federativa.

Aquí, y a reserva de tratar con mayor profundidad el tema en una próxima entrega, se tiene que analizar el papel que juegan las también denominadas policías comunitarias como las de la UPOEG y la CRAC-PC, o los grupos de civiles armados que se escudan bajo esas siglas, porque además de que no tienen ningún sustento legal, han estado cometiendo diversos ilícitos como la privación ilegal de la libertad de las personas.

Aquí, queremos comentar uno de los homicidios dolosos que tiene un alto impacto en la sociedad, y es el que se cometió apenas el pasado jueves 13 de abril, al ser asesinados a mansalva, con alevosía, premeditación y ventaja el dirigente de Antorcha Campesina, Conrado Hernández Domínguez, su esposa Mercedes Martínes Martínez, y su pequeño hijo, de siete años de edad.

De acuerdo a la información, los asesinos intentaron hacer creer que el dirigente antorchista, su mujer y su hijo, habían perdido la vida durante un accidente automovilístico, cuando su unidad automotriz cayò a un barranco por Agua de Obispo, sin embargo, la autopsia reveló que los dos adultos fueron muertos a golpes y el menor asfixiado.

Y si solo hacemos referencia a este hecho criminal, es porque no tenemos espacio para narrar y describir no solo los homicidios dolosos, sino las desapariciones –sobre todo de mujeres, niñas y jovencitas- , los feminicidios, las denuncias de extorciones y cobro de cuotas, los desplazamientos forzados y el control de territorios de la delincuencia organizada, en donde controlan, por ejemplo, el precio de los productos básicos, que ocurren diariamente en esta entidad federativa a cualquier hora del día y de la noche, en lugares públicos o apartados y en el centro o en la periferia de las ciudades.

Y por el mismo espacio de la columna, ya no transcribiremos, por el momento, las declaraciones de varios representantes de diversos sectores de la sociedad, quienes se han sumado a la denuncia y al llamado de los obispos Salvador Rangel Mendoza y José de Jesús González Hernández, para que las autoridades atiendan la problemática de la inseguridad y la violencia que está afectando a toda la sociedad.

Al cierre sobre este tema, que lo seguiremos tratando, recordamos que después de 13 meses siguen desaparecidos los marinos Oscar González y Victoriano Rodríguez, que la alcaldesa de Acapulco, Abelina López Rodríguez asignó para la seguridad del senador José Narro Céspedes. Así también, se desconoce el paradero del Servidor de la Nación, Miguel Huerta Flores, quien desapareció el pasado 28 de febrero en el municipio de Taxco de Alarcón…Veremos.

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