Ante la revelación, estudiantes de Ayotzinapa se movilizaron este martes hacia Chilpancingo a bordo de 12 autobuses y dos camionetas Urvan que llegaron directamente a las instalaciones de la dependencia

Texto Bernardo Torres/ Jesús Saavedra

Chilpancingo, 12 de marzo de 2024.- Luego que se informara la fuga del agente de la Policía del Estado del grupo “Centauro” que habría disparado al estudiante de Ayotzinapa, Yanqui Kothan Gómez Peralta, sus compañeros de normal irrumpieron de manera violenta en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) donde dejaron una decena de autos incendiados y daños en las oficinas.

Este martes por la mañana el presidente, Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que este lunes el policía del Estado que iba a ser puesto a disposición de la FGR por haber disparado y asesinado al normalista, se había dado a la fuga.

Esa noticia estaba circulando desde la noche del lunes y fue hasta este martes por la mañana cuando López Obrador confirmó la fuga del policía estatal en un acto de “complicidad” de las autoridades locales para huir de la acción de la justicia.

La gobernadora, Evelyn Salgado Pineda también informó la noche de este lunes de un diálogo con el Comité Estudiantil de Ayotzinapa y con Lilia Vianey Gómez, mamá del normalista asesinado, con quienes se abrieron canales de diálogo y evitar protestas violentas.

Ante la revelación de la fuga del policía involucrado, estudiantes de Ayotzinapa se movilizaron este martes hacia Chilpancingo a bordo de 12 autobuses y dos camionetas Urvan que llegaron directamente a las instalaciones de la FGE.

De manera coincidente, los centenares de agentes de la Guardia Nacional (GN) que se habíam dispuesto para salvaguardar las instalaciones de la FGE se habían retirado. Los autobuses estacionaron frente a la FGE entre el SNTE y unas funerarias que se ubican en esa vía de comunicación, de donde bajaron y arremetieron sin encontrar resistencia.

El grupo de aproximadamente 300 jóvenes arremetieron contra las instalaciones, lanzando petardos contra la fachada, rompiendo vidrios y puertas.
En el estacionamiento se encontraban unos 300 elementos de la Guardia Nacional quienes trataron de repeler la agresión regresando las piedras que lanzaban los estudiantes.


Ocho vehículos fueron incendiados en el estacionamiento y dos sobre la calle del Encauzamiento Huacapa, y una veintena de elementos lesionados por los petardos, entre elementos de la GN y Policías Ministeriales.
A pesar de la resistencia en por lo menos dos momentos los elementos de la GN no pudieron replegar a los normalistas y se refugiaron en el Edificio de Capacitación, ubicado en el mismo complejo.
Los trabajadores habían sido desalojados apenas minutos antes de la irrupción de los normalistas y sólo se encontraban personal con equipo antimotines.

Durante la embestida de los normalistas, a varios reporteros les quitaron sus teléfonos celulares con los que estaban dando testimonio del hecho y por ejemplo al reportero, Manuel Segura aventaron su teléfono a la camioneta que incendiaron sobre el encauzamiento; además en la acción de los normalistas resultaron lesionados varios agentes de la policía Ministerial y de la GN que resguardaban esas instalaciones y que fueron trasladados para su atención médica.
Tras al menos media hora de ataque y confrontación los estudiantes se retiraron a las instalaciones de la Normal Rural, mientras peritos de la FGE realizaron una evaluación de los daños.

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