En la conferencia mañanera, responde el presidente sobre la disputa de territorio de grupos criminales, diciendo que «se dejó crecer; viene de tiempo atrás, desde hace dos o tres sexenios»

Texto Jesús Saavedra

Chilpancingo, 20 de febrero de 2024.- El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en Guerrero y en todo el país “se está combatiendo a la delincuencia” y que en sexenios anteriores, el gobierno permitió que los grupos de la delincuencia entraron a las comunidades donde echaron raíces se fortalecieron y han logrado tener “en algunas partes base social de respaldo”.

Este martes un reportero le preguntó al presidente sobre la violencia que hay en Guerrero por la disputa del territorio entre los carteles del crimen organizado de “Los Tlacos” y “Los Ardillos” aseveró que en su gobierno “nosotros no tenemos acuerdos con ellos, estamos trabajando con la gente”.

Ratificó que Guerrero, Oaxaca y Chiapas son los estados que más apoyo tienen del gobierno federal que encabeza, “donde más se está atendiendo al pueblo, hay un cambio completo”.

Aseveró que “se está combatiendo la delincuencia en Guerrero y en todo el país, lo que pasa es que creció mucho, se dejó crecer; viene de tiempo atrás, desde hace dos o tres sexenios y echaron raíces, se fortalecieron en comunidades, tienen en algunas partes base social de respaldo y apoyo, también entraron por la vía de los partidos en el país desde hace algún tiempo; se está haciendo y lleva su proceso”.

Recordó que en julio del año pasado pobladores del circuito Río Azul, de Petaquillas hasta Quechultenango, donde tiene presencia el grupo criminal “Los Ardillos” se movilizaron y “tomaron Chilpancingo, con mucha gente; no sé, mil, dos mil”.

Acusó a “Los Ardillos” que en esa movilización “buscaban la confrontación y lo que hicimos fue no caer en la provocación, se retiró la Guardia Nacional, porque querían (Los Ardillos) la confrontación; entonces tomaron Chilpancingo”.

Indicó que le pidió “a la gente que no se dejara manipular, incluso pusimos aquí unas fotos de unos dirigentes (de Los Ardillos) que acababan de regresar, creo que de París, de estos dirigentes de grupos de la delincuencia y se fueron (de Chilpancingo)”.

Aseveró que atender la violencia generada por la delincuencia organizada “no es fácil que desaparezcan, son procesos, vamos avanzando bastante, sobre todo porque ahora los jóvenes son atendidos, los pobres son atendidos. Creció tanto la delincuencia porque se abandonó al pueblo, la gente no tenía apoyo” y enlistó el apoyo que le da a los jóvenes a través de becas.

Señaló que su gobierno “enfrenta de otra manera el problema de la inseguridad y la violencia, atendiendo las causas; no se puede enfrentar la violencia con la violencia” y que ha pedido al Ejército, la GN, la Marina “que se evite caer en la provocación, que se utilice más la inteligencia, que la fuerza, que no haya enfrentamientos, que no haya masacres y que se detenga a los dirigentes de las bandas, como se ha venido haciendo, porque no hay impunidad para nadie, porque hay muchas resistencias”. (Fotografía archivo)

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