Responsabilizan al subsecretario de Finanzas y Administración de la Secretaría de Salud estatal, Fernando Soto López y otros funcionarios, de beneficiar a sus allegados


Texto Bernardo Torres Morales
Chilpancingo, 6 de noviembre de 2023.- Al menos 600 empleados de la Secretaría de Salud estatal entre médicos y enfermeras quedaron fuera del proceso de basificación laboral que está llevando a cabo la Secretaría de Salud federal, debido a que sus datos fueron mal procesados por la dependencia estatal.
Un grupo de afectados se manifestaron en la sede del Poder Ejecutivo donde se estaba llevando a cabo la entrega de una segunda etapa de nombramientos para acceder a una basificación.
Lizbeth Rodríguez Barragán, enfermera con maestría y ocho años de servicio en la zona de la sierra del estado, fue una de las afectadas y responsabilizó al subsecretario de Finanzas y Administración de la Secretaría de Salud estatal, Fernando Soto López y otros funcionarios de esta dependencia.


Señaló que desde la dependencia alteraron datos e información que fueron enviados a la Federación con el objetivo de obstruir su ingreso y beneficiar a sus allegados, algunos que apenas llevan seis meses laborando.
Acudieron a buscar información con funcionarios federales, donde se deslindaron de este problema y les dijeron que solo acataron la información enviada por Salud estatal. Los afectados son 500 trabajadores de salud que corresponden al Formato de Movimiento de Personal (FOMOPE) y 100 trabajadores eventuales, a quienes hasta hoy les dijeron que no fue aprobada su documentación para basificarse.
El jueves pasado se llevó a cabo una etapa de entrega de mil 900 nombramientos y este día se entregaron otros 226, donde incluso se les negó el ingreso a una comisión para tratar de dialogar con autoridades estatales y federales.
Lizbeth Rodríguez consideró una injusticia lo que se le está haciendo a ella y sus compañeros, pues hay quienes llevan laborando en lugares alejados como la sierra, en medio de desastres naturales, la inseguridad y la pandemia.
La doctora Diana Saldaña Contreras es otra de las afectadas, dijo que en el mes de febrero les hicieron firmar un «seudo contrato», con aumento salarial y en agosto salen los lineamientos para basificación, al que ya no pudieron acceder.
Exigió, junto a su colegas afectados, que funcionarios estatales y federales den la cara por estas irregularidades, y no cesarán en su demanda hasta que se les haga justicia laboral.

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