*Denuncian que el Ministerio Público de Tixtla culpa al maestro de artes marciales de ser él quien invadió el carril y de haber provocado el accidente.
Texto y fotografías: Juan Blanco
Chilpancingo, Gro., 22 de septiembre de 2021.- Familiares de Jacinto Palacios Celino, quien murió junto con Raquel Acosta en un accidente vehicular en el que habrían estado involucrados los alumnos de la Escuela Normal Rural «Raúl Isidro Burgos» de Ayotzinapa, solicitaron a éstos que entreguen al chófer del autobús que impactó el automóvil en el que viajaban las víctimas mortales, para que sea investigado.
Además, pidieron a la Fiscalía General del Estado (FGE) que sea el Ministerio Público de Chilpancingo y no el de Tixtla el que se haga cargo de los peritajes del siniestro, dado que, denunciaron, comienzan a ver irregularidades en el proceso y solapamiento a los presuntos responsables.
Este martes, Josué Palacios Espinoza, Violeta Espinoza Antaño y Manuel García Navarrete, hijo, esposa y amigo del maestro de artes marciales, ofrecieron una conferencia de prensa a reporteros de diversos medios de comunicación para dar una postura del caso.
Dijeron que su familiar y su acompañante venían de Apango, la cabecera municipal de Mártir de Cuilapan, en la zona Centro de Guerrero, de visitar a su seres queridos cuando, al transitar por la carretera de cuota Chilpancingo-Tixtla, su «vocho» fue impactado por un autobús que transportaba a normalistas que venían de realizar una protesta en Acapulco.
Agregaron que el choque provocó que el autobús se incendiara, al igual que el carro en el que viajaban Jacinto y Raquel, quienes murieron calcinados porque no pudieron salir debido a que estaban prensados.
Ante este hecho, su hijo Josué Palacios Espinoza manifestó que «lo que pedimos es que haya justicia, se haga lo debido; sus alumnos lo merecen, su familia lo merece. Él tenía muchos proyectos para con la juventud».
Dijo que el Ministerio Público de Tixtla que depende de la Fiscalía General del Estado inició una carpeta de investigación de oficio, pero denunció que, sin concluir las investigaciones, está culpando a su papá de provocar el siniestro porque supuestamente invadió el carril en el que transitaba el autobús, cuando hay evidencias que no fue así, aseguró.
Reprochó que haya sido hasta el pasado domingo 19 que la Escuela Normal Rural «Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa» emitió un comunicado en el que reconoció que en el autobús sí viajaban los alumnos pero que negó que sean los culpables como se les señala, y que se solidarizó con las familias y ofreció su apoyo para el desarrollo de las investigaciones.
Sin embargo, los dolientes consideraron que si en verdad quieren ofrecer su ayuda entreguen a las autoridades al chófer que conducía el autobús o que por lo menos den su nombre para que sea investigado. «Ellos ya deberían estar aportando información para la investigación», insistieron.
En cuanto a las supuestas irregularidades en la investigación, exigieron a la Fiscalía General del Estado que preside Jorge Zuriel de los Santos Barrila que sea el Ministerio Público de Chilpancingo y no el de Tixtla el que se haga cargo de los peritajes del siniestro.
A pregunta expresa negaron que sean ellos quienes han estado convocando a la ciudadanía a una marcha para exigir justicia por las víctimas mortales, como se ha dado a conocer en redes sociales en los últimos días.